Periódico zonal del Barrio de Liniers para la Comuna 9
April 27, 2024 12:48 pm
Cosas de Barrio

La llamada

El recuerdo de los años en los que los teléfonos fijos no abundaban en el barrio y apelar a la generosidad de algún vecino era la llave para estar comunicados

Por Daniel Aresse Tomadoni (*)

Días pasados recordaba los tiempos en que en el barrio, muy pocos eran los afortunados que tenían en su casa una línea telefónica. Corrían los años 60’ y por entonces sólo los vecinos más antiguos, tal vez contaban con una desde aquellas épocas de gloria, cuando operarios de la vieja Unión Telefónica golpeaban las puertas de las casas ofreciendo las líneas y el aparato, al tiempo que iban tendiendo las redes por los postes, para que en pocos días más quedaran habilitadas y funcionando.

Hasta aquí este relato se asemeja al de un país del primer mundo o, en tal caso, a un argumento propio del género de ciencia ficción, pero efectivamente ocurrió en la Buenos Aires de los años 20’ y los 40’. Claro que pasó el tiempo y la burocracia condenó a décadas de espera a los usuarios que se registraban para conseguir una línea. Por casa, sin embargo, gracias a la generosidad de dos almaceneros, Don Manuel Rivera y Don Henares, los vecinos accedíamos a sus aparatos instalados en los locales a un servicio que, a veces, por una moneda nos permitía comunicarnos con la familia, ante alguna emergencia médica, o por negocios que merecieran un contacto impostergable (recuerdo que hasta había un vecino que argumentando urgencias recurrentes, lo pedía para pasar quiniela).

Tengo bien presente aquel teléfono de Don Henares, ubicado en el enorme almacén, detrás de una heladera Sello de Oro y apoyado sobre unos estantes del depósito. Era de los antiguos, tipo candelero, de color gris con una bocina y el auricular colgando como en las películas o series de los años 30’. Otra alternativa era caminar un par de cuadras hasta el café de Tuyutí y José León Suárez, pero a veces se tornaba complicado hablar allí, por el bullicio del ambiente o porque el teléfono público, negro y cuadrado, no siempre funcionaba.

¡Ni que hablar del vecino que contaba con un aparato! En una de las casas del barrio donde me mudé, allí en la avenida General Paz y el pasaje Luchter Sur, recuerdo que la adquirimos con teléfono y era casi cotidiano que cayera algún vecino a solicitar los servicios de ese tan apreciado y buscado aparato en ese entonces. Claro que no faltaba aquel que pidiera el teléfono para alguna “urgencia”, aunque también estaban aquellos que se excedían y le daban un uso banal y abusivo. Vale recordar que en aquellos años el servicio aún no era medido, de lo contrario hubiese sido un tanto complicado abonarlo. No obstante era común que las líneas se “ligaran” y entonces dos conversaciones se mezclaran. “Está ligado ¡corte por favor que estoy en una llamada importante!”, solía reclamar uno de los hablantes, pero eso sí, siempre tenía que cortar el otro…

Pasó el tiempo y de a poco las casas se fueron poblando de líneas y aparatos telefónicos, sumando ya en los 80’ los planes para adquirirlos con más facilidad. Los aparatos se fueron modernizando, y el negro tradicional le dio paso al gris y más tarde al rojo y al naranja. Pocos después, el disco le cedió su lugar al teclado numérico. En un principio, la característica de Liniers se resumía en dos dígitos: 64, más tarde con la instalación de nuevas líneas se amplió a tres y con dos alternativas: 641 y 642. Para entonces, el teléfono ya estaba al alcance de todos y de a poco, recurrir a los teléfonos públicos del bar o la panadería, al igual que los domiciliarios, fue pasando a un segundo plano. Las cabinas callejeras se convirtieron en una opción, aunque los cospeles duraban poco más que un suspiro. Más adelante, aparecerían los inalámbricos, un número 4 se antepondría al número telefónico y un poco más acá, llegarían los celulares, pero eso ya es otra historia.

Así pasó un recuerdo más de nuestro querido Liniers. Espero lo hayan disfrutado tanto como yo. Hasta la próxima.

 (*) Aresse Tomadoni es director general de Multinet (Radnet/La Radio, El Viajero TV, Club de Vida TV)

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