Periódico zonal del Barrio de Liniers para la Comuna 9
April 25, 2024 4:25 am
Cosas de Barrio

Cuando era posible lucir los rollos

El recuerdo de los viejos estudios fotográficos en el Liniers de antaño

Por Daniel Aresse Tomadoni (*)

Seguramente estarán pensando que en esta entrega hablaré de regímenes o dietas para llegar al verano con un físico envidiable, pero nada más alejado de las adiposidades y los abdómenes prominentes. Hoy dedicaré mi columna a recordar las viejas casas de fotografía del barrio de Liniers.

Para ello es necesario dejar en claro que, en un comienzo, estos locales retrataban la vida misma de la comunidad barrial, ya que los servicios de los “foto estudios”, como se los llamaba en ese entonces, eran infaltables en bautismos y comuniones. Así, frente a pesados armatostes fotográficos elaborados en sólida madera y chasis de metal -que se desplazaban por guías hacia adelante o atrás- los retratados atendían las órdenes del fotógrafo y posaban de distintas maneras, de acuerdo con la ocasión. Claro que no era fácil mantener a un bebé quieto por varios minutos -menos aún desnudo y recostado sobre un almohadón- y más con el largo tiempo de exposición que requerían las antiguas películas, pero fotógrafos de la talla de Name, en su estudio de la calle Rivadavia -donde después funcionaron las Academias de Peluquería OLI- Jacub, en la calle Carhué, Photo Pohol, en Rivadavia y Montiel, o Foto Oeste, sobre Francisco de Viedma, por mencionar los mejores, lograban lo imposible.

En ese entonces, hasta las fotos carnet eran tomadas en estudio. Recuerdo un estudio de fotos, también en el barrio, cuyo responsable no sólo tenía pocas pulgas, sino que además poco antes de tomar las fotos, encendía unos faroles poderosísimos capaces de encandilar a cualquiera, lo que no ocurría en los estudios anteriormente mencionados. Muchas veces, incluso, se exhibía en sus vidrieras algún retrato de un personaje famoso -Liniers tuvo muchos- que hubiera sido fotografiado para algún casting de la época.

Claro que los tiempos cambiaron y la fotografía se hizo más accesible a los bolsillos, con líneas de cámaras económicas y versátiles de distintos orígenes. Fue entonces cuando surgieron las casas de revelado en blanco y negro y color, tales como “Carrousel Fotográfico”, con más de sesenta años en el barrio, en la esquina de Montiel y Humaitá.

A través de esas décadas, han transitado las enormes cámaras de estudio, las de revelado instantáneo, las modernas instantáneas americanas, las réflex, las reveladoras automáticas hasta llegar a las digitales. Sin embargo, aquellos momentos donde salíamos vestidos de lujo para posar frente a las luces y la cámara o quedar perpetuados con nuestros trajes de comunión en los cuadros de las vidrieras de las casas de fotos del barrio, son momentos imborrables de “El Liniers que yo viví”. Hasta la próxima y muchas gracias por permitirme compartir mis recuerdos.

 (*) Aresse Tomadoni es director general de Multinet (Radnet/La Radio, El Viajero TV, Club de Vida TV)

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