Liniers le pone fichas a su objetivo de ascenso

El Celeste se trajo una victoria inobjetable de su visita a Real Pilar, por los cuartos de final del reducido de la Primera C. El 2 a 1 a favor lo pone con ventaja para intentar cerrar la llave el sábado próximo en su estadio de Villegas, y seguir ilusionándose con la posibilidad del ascenso.

Tras quedar a apenas un punto del ascenso directo en las dos ruedas en las que se extendió el certamen de Primera C, Liniers sigue acunando el sueño de ascender a la Primera B Metropolitana. En post de ese objetivo, en la soleada tarde del sábado 14 de octubre, comenzó a darle forma a la ilusión al traerse un valioso triunfo como visitante ante Real Pilar, por el partido de ida de los cuartos de final de reducido, que lo tiene como candidato para acceder al cuarto y último cupo de ascenso.

El resultado final fue 2 a 1 para la Topadora del Oeste, que logró dar vuelta el partido que tuvo un trámite vibrante en el que el desempeño del Celeste fue de menor a mayor. Liniers mostró el coraje necesario para recomponerse de un duro golpe y terminar quedándose con la victoria.

Durante la primera etapa, el dominio de las acciones fue para el Monarca, que aprovechó las distracciones de los dirigidos por Guillermo De Lucca, que salieron algo distraídos y mal parados al campo de juego. El marcador se abrió a los 38’, luego de que Gabriel Gutiérrez pitara penal a favor de los locales tras una infracción de Cristopher De Feliche. Mathías Crocco se hizo cargo, y cambió la pena máxima por gol.

Sin embargo, los cambios introducidos por el cuerpo técnico desde los vestuarios surtieron efecto para el Celeste, que fue ampliamente superior a su rival en el complemento. Sobre los 55 minutos, Julián Rodríguez Seguer cumplió con la ley que dicta que dos cabezazos dentro del área son gol, para igualar la contienda.

El golpe caló hondo en Real Pilar, y cuatro minutos más tarde la remontada de Liniers se hizo realidad. Un despeje mordido cayó en los pies de Ignacio Sallaberry, quien buscó la cabeza de un Rodrigo Dimotta que había quedado en área local, y, con ayuda de un desvío en la humanidad de José Silva, selló el 2 a 1 final para la visita.

Con esta victoria, Liniers llega de la mejor manera posible al partido de vuelta, que se disputará el sábado 21 de octubre desde las 15:30 en el Juan Antonio Arias. Una nueva cita con la historia del conjunto matancero, que sigue soñando con el ascenso a la tercera categoría del fútbol argentino.