Escritores de Liniers presentaron su libro en el Salón Dorado de la Casa de la Cultura

“Cruentos de escritorpres” es una selecta antología que reúne cuentos de doce autores locales. Todos integran el Taller Literario del Centro Cultural Elías Castelnuovo, que se hizo presente en la histórica sede del diario La Prensa, ante un auditorio colmado y entusiasta. La pausa musical estuvo a cargo del Taller de Guitarra y las imágenes del encuentro fueron retratadas por el Taller de Fotografía.

Este martes 27 de junio, poco después de las 18, se llevó a cabo en el Salón Dorado de la Casa de la Cultura porteña (ex edificio La Prensa, de avda. de Mayo 575, CABA) la presentación del libro “Cruentos de escritorpes”, antología elaborada íntegramente por los escritores que conforman el Taller Literario del Centro Cultural Elías Casltenuovo, del barrio de Liniers. La obra, editada en forma independiente, incluye 33 cuentos de doce autores locales, que llevan al lector por diversas y entrañables historias en las que -inevitablemente- será partícipe necesario.

Además de la presencia de los autores y del coordinador del Taller, Lic. Ricardo Nicolini, el acto contó con la participación de la Coordinadora del Centro Cultural Elías Castelnuovo, Natalia Paveto, y de los integrantes del Taller de Guitarra, que dirige el maestro Diego López Barrios, quienes amenizaron el encuentro con una aplaudida pausa musical. Los alumnos del Taller de Fotografía, por su parte, con la guía del docente Gustavo Grandinetti, fueron retratando cada momento de la presentación.

“Estamos muy contentos de haber parido este libro y de poder presentarlo en sociedad en esta sede emblemática de la Ciudad de Buenos Aires. Cruentos de escritorpes es un sueño hecho realidad y es, orgullosamente, una producción autogestiva y creada colectivamente, lo que no hace más que demostrar, una vez más, que la unión hace la fuerza. Y como en toda historia compartida, más temprano que tarde aparece el final feliz”, expresó Nicolini en la apertura del encuentro, luego de destacar la figura del emblemático escritor del que lleva el nombre el centro cultural linierense -ubicado en Montiel 1041- y cuyo legado impulsara la concreción de esta anhelada aventura editorial.

A su turno, cada uno de los autores que participan de la antología fue leyendo un párrafo de alguno de sus cuentos, que fue seguido atentamente por el numeroso auditorio. Así, Alejandra Torrecilla, Azucena Di Paola, Carlos Yametti -principal instigador de la puesta en marcha del proyecto-, Fernando Labriola, Gabriel Martino, Gabriela Peirano, Gladys Guido, Itatí Albamonte, Juan Carlos Vaquero, Laura Zevi, Melisa Bardoneschi y Silvana Capozucca, fueron bosquejando el contorno de historias atrapantes, para que luego los lectores las disfruten de punta a punta en las páginas del libro.

“Me llamo Jan, soy escritorpe y me autopercibo de 30 años, porque la vejez. la vejez es un cuento”, comenzó expresando sobre el final del encuentro Juan Carlos Vaquero, uno de los autores, pero además creador del diseño de tapa y motor esencial en la edición y materialización del proyecto. “Pero no es cuestión de quedarse quieto -continuó-. De modo que intenté con el canto. No me fue mal, ahora tengo una colección de zapatos de mis vecinos. Entonces volví a intentar con una pasión de la infancia: escribir. Escribí mi primer libro a los 4 años, se llamaba El Quijote de la Mancha, lo escribí todo con crayones de grasa y fibrones, era una edición española ilustrada de mi padre. Aún me duele la paliza. Llorando le dije, algún día escribiré mi propio libro y nadie me va a decir nada. Tarde, pero cumplí, viejo”.

Acto seguido, Lidia Saralegui, allegada a la familia de Elías Castelnuovo, tomó la palabra para felicitar a los flamantes “escritorpes” y aprovechó para donarle al centro cultural, una imagen del recordado escritor con su firma.

El cierre llegó a pura música, con un solo de saxo de Diego López Barrios, que le puso el broche de oro a una jornada para el recuerdo.

Aquellos que deseen hacerse de un ejemplar de “Cruentos de escritorpes”, podrán solicitarlo vía mail a este medio, escribiendo a cdebarrio@hotmail.com. Para que en plena era digital, en épocas de pantallas táctiles, donde prevalece lo efímero, el libro se rebele contra eso enarbolando una especie de “revolución de la nostalgia”, donde aún se pueda garabatear o subrayar algún párrafo, y hasta guardar un boleto capicúa que haga las veces de señalador.