Clausuran un cine porno que funcionaba en el sótano de una galería de Liniers

Mientras realizaba una inspección en la Galería San Francisco, de General Paz a metros de Rivadavia, la Policía de la Ciudad descubrió una improvisada sala de cine pornográfico que funcionaba en forma irregular en el sótano de ese paseo comercial. Además, durante el procedimiento -que finalizó con la clausura de 12 locales- detuvo a un hombre y secuestró 86 teléfonos celulares y accesorios ilegales.

El procedimiento fue encabezado por efectivos del Departamento Contravenciones y Faltas y de la División Contravenciones y Faltas Contra el Orden Público de la Policía de la Ciudad, junto a personal de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), y se desarrolló en la tarde de ayer dentro de la tradicional galería “San Francisco”, ubicada sobre la avenida General Paz 10658, en el barrio de Liniers, a metros de la delegación de Anses.

Realizadas las primeras pericias se observó que la galería presentaba matafuegos vencidos, por lo que se clausuró de forma inmediata. Además, se constató que dentro del paseo comercial funcionaban 16 locales, y uno de ellos estaba acondicionado como un cine pornográfico. El pequeño local se mostraba vacío, apenas un cartel escrito a mano indicaba: “Entradas 500 pesos”. Pero sobre la pared del fondo se comunicaba con una extensa escalera que derivaba en un sótano donde funcionaba una sala ambientada artesanalmente con una veintena de viejas butacas, para recibir clientes y proyectar películas pornográficas en una rústica pantalla de tela. Un viejo proyector pendía de un anaquel con todos los cables expuestos bordeando el techo. La rudimentaria sala -sucia, despintada y sin ventilación, aunque con aire acondicionado- estaba coronada por una especie de pullman en un entrepiso en el que se alineaban tres bancos de plaza. Junto a ellos se encontraban latas de cerveza vacías y preservativos tirados en el piso.

En la galería también había peluquerías, locales de comidas (con cucarachas caminando sobre los alimentos) y de venta y reparación de telefonía celular. Doce de los locales visitados se encontraban en infracción al Código Contravencional de la Ciudad de Buenos Aires.

Entre los locales investigados, seis de ellos se dedicaban a la compra, venta y reparación de celulares. Allí se encontraron siete aparatos denunciados como robados ante los registros del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) y 78 inhabilitados por infracción a la Ley 6.009, que regula la identificación de los aparatos electrónicos usados de telefonía celular, sus repuestos. Como resultado, dos de los encargados fueron imputados y se les labró las actas de rigor.

Por otra parte, mientras se realizada el procedimiento en la galería, se observó la llegada de un hombre de nacionalidad venezolana que entró a uno de los locales y, al percatarse del procedimiento policial, quiso escapar raudamente y fue demorado. Posteriormente se lo requisó ante la presencia de testigos y se le encontró entre sus pertenencias un celular con denuncia de robo ante el ENACOM.

Realizadas las consultas ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N° 3, a cargo del Dr. Daniel Rafecas y ante la Secretaría del Dr. Sergio Ruiz, se ordenó su detención y el posterior traslado a dependencias de la Policía de la Ciudad.